Las artes marciales ayudan a los niños a canalizar su exceso de energía. Permiten desarrollar capacidades físicas y mentales en el niño, a la vez que aumenta la autoestima, favorece su crecimiento y les acerca a la disciplina y el autocontrol.
" Las artes marciales ayudan a los niños a canalizar su exceso de energía. Permiten desarrollar capacidades físicas y mentales en el niño, a la vez que aumenta la autoestima, favorece su crecimiento y les acerca a la disciplina y el autocontrol. "
El judo o yudo es un arte marcial y deporte de combate de origen japonés.
El término japonés puede traducirse como «camino de la flexibilidad», incluyendo el desarrollo mental y emocional a través de la práctica.
En definitiva, más allá del deporte en sí, el judo es una forma de vida, ya que aparte de que desarrolla capacidades físicas tales como la coordinación, fuerza y flexibilidad, también su aprendizaje fortalece la autoconfianza, la concentración y la capacidad de liderazgo, que marcarán en el día a día de nuestra enseñanza.
A nivel competitivo, el judo es deporte olímpico desde las olimpiadas de 1964. Y también paralímpico, ya que se introdujo en las paraolimpiadas de Seúl en 1988 en su variante masculina, ampliándose a la femenina a partir de Atenas 2004.
Es un deporte para todos, independientemente de la edad y sexo, ya sea a nivel de iniciación o a un nivel más avanzado. También es ideal para personas con discapacidades ya que ayuda al desarrollo integral de la persona y puede practicarse conjuntamente con personas sin discapacidad, lo que lo convierte en un deporte inclusivo.
En cuanto a la enseñanza de la actividad del Judo enfocada a niños, es muy interesante saber que fue declarado como el mejor deporte de iniciación para pequeños en edades comprendidas entre los 4 y los 12 años por la UNESCO.
Todo ello, siempre desde la transmisión y enseñanza de valores de respeto, tolerancia, motivación, autoestima, educación, compañerismo, solidaridad y trabajo en equipo.
Por lo tanto, es un deporte de los más completos a nivel físico y mental. Por ello, no sólo buscamos una enseñanza de calidad en nuestros alumnos, que les ayude a mejorar y avanzar en la práctica del deporte, sino que también procuramos formar a personas con unos valores y capacidades que les sirva para su vida más allá del tatami.